Trenes Argentinos: la historia del "ramal fantasma"
BUENOS AIRES 14 Sept(Vivi el Oeste)Para quienes viajan desde la Zona Norte el Ramal Mitre. Desde Zona Oeste el Sarmiento, el San Martín o el Belgrano Sur. El Roca para quienes se trasladas desde la Zona Sur. La red metropolitana de Trenes Argentinos conluye en la Ciudad de Buenos Aires y se extiende por todo el AMBA con ramales fijos para cada zona. Sin embargo hay uno que rompe con ese diseño. Es conocido como el "Tren Fantasma" y va desde Zona Oeste a zona Sur para unir las ciudades de Haedo y Temperley. Una opción poco conocida pero muy utilizada por aquellas personas que querian viajar de una localidad a otra sin tener que pasar por Capital Federal.
Una formación del Tren Roca a su salida en el Oeste del Conurbano
Este es un ramal operado por la Línea Roca de Trenes Argentinos. El servicio parte desde el Oeste en la estación Haedo que está pegada a su homónima del Sarmiento, y tras atravesar localidades de La Matanza y Lomas de Zamora llega a Temperley. En abril de este año volvió a funcionar el servicio tras más de un año sin hacerlo durante la pandemia. Actualmente se ofrecen un total de siete servicios diarios por sentido, tres menos que en el último diagrama vigente antes de la suspensión, que demorarán una hora y 20 minutos en unir ambas cabeceras.
"El servicio había sido interrumpido en el año 2019 debido a un socavón en el terraplén cerca del kilómetro 35", relataron desde En El Subte. La proximidad de muchas viviendas, en situación precaria, con las vías y el paso del tren es una de las imágenes características de este servicio de Trenes Argentinos que une el Oeste y el Sur del Conurbano. La importancia de este ramal radica en su transversalidad que permite conectar con los otros sin tener que llegar a la Ciudad de Buenos Aires.
Las razón de la denominación como Tren Fantasma
El nombre surgió debido a la necesidad en el pasado de apagar las luces de las formaciones durante las recorridas nocturnas por temor a hechos de inseguridad y vandalismo. Debido a que atraviesa zonas de alto nivel de delito del Oeste y el Sur bonaerense, varios policías viajan en los coches. Sin embargo como los ataques vandálicos eran difíciles de prevenir, el servicio atravesaba a oscuras todo su recorrido durante la noche y así buscaban evitar darle referencias a los ataques.
“Acá no importa cómo vas. Estás sentado o parado y ¡boom!, aparecen las piedras”, contó un pasajero durante un informe televisivo que relató de manera cruda la realidad de este servicio que sale desde Haedo. Además muchos vecinos mostraron su temor por la falta de barreras en algunos cruces y la cercanía de un grupo de casas bajas con las vías.
Este servicio de Trenes Argentinos permite atravesar, en un viaje de menos de dos horas, las diferentes realidades del Conurbano. La situación en las dos cabeceras, Haedo y Temperley, dista mucho de lo que uno se puede encontrar a mitad de recorrido en las profundidades de La Matanza o Lomas de Zamora. Allí las estaciones no tienen molinetes ni guardias de seguridad y la mayoría de los vagones van semivacíos.
Las paradas intermedias y la posibilidad de la Estación UNLAM
La Estación Ingeniero Santiago Brian entre Haedo y San Justo
Uno de los objetivos de Trenes Argentinos es potenciar este ramal Haedo-Temperley mejorando las frecuencias así como la seguridad para que más vecinos del Oeste elijan este servicio. Además la idea es construir estaciones intermedias en la traza y una zona clave, por la cantidad de gente, es la de la Universidad Nacional de la Matanza. El tren luego de salir de Haedo, llega a Brian (una estación muy pequeña) para luego ingresar en una más importante como lo es San Justo.
La traza ferroviaria del ramal Haedo - Temperley pasa por detrás de la casa de estudios y a pocos metros de uno de sus principales ingresos, pero no cuenta con una parada propia. La estación más cercana es la de San Justo, que queda a 700 metros, y poseer una en la zona que se encuentra "detrás de la universidad" permitirá sumar una opción rápida para los alumnos que lleguen desde Haedo y El Palomar.
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