Reformaron el estatuto de Ferrocarriles Argentinos
BUENOS AIRES 23 Dic (ENElSubte).-Ferrocarriles Argentinos Sociedad del Estado (FASE) celebró una reunión de directorio en la que resolvió varias cuestiones de importancia.
El directorio de la empresa estatal resolvió postergar el nombramiento de nuevos directores titulares y suplentes, y del nuevo presidente de la compañía hasta tanto se pueda realizar una nueva asamblea ordinaria.
Ferrocarriles Argentinos SE fue recreada como empresa ferroviaria nacional a partir de la ley 27.132 de 2015, que la estableció como responsable de la coordinación de la política ferroviaria nacional y sociedad controlante de las distintas empresas ferroviarias estatales preexistentes. No obstante, a poco de asumir el gobierno de Mauricio Macri la nueva sociedad madre se convirtió en una cáscara vacía. La gestión Dietrich también ocultó la marca y logo de Ferrocarriles Argentinos, que se había recuperado en 2015, para volver a la anterior denominación de fantasía Trenes Argentinos.
Cabe recordar que, tal como explicó este medio, a diferencia del resto de las empresas ferroviarias subsidiarias de FA –en las que asumieron funcionarios designados por la nueva gestión– en Ferrocarriles continúa a cargo el abogado Martín Ferreiro, designado en el puesto durante el gobierno de Mauricio Macri.
Otra decisión de importancia adoptada en la reciente reunión de directorio fue la integración de la empresa DECAHF (Desarrollo del Capital Humano Ferroviario, conocida también por su nombre de fantasía Trenes Argentinos Capital Humano) a la estructura de la empresa y a su presidente, Damián Contreras, como miembro del directorio de FASE.
DECAHF no formaba parte de Ferrocarriles Argentinos debido a que al momento de crearse la empresa en 2015 se había decidido que el organismo, entonces conocido como ARHF (Administradora de Recursos Humanos Ferroviarios), dejaría de existir y se integraría a la SOFSE.
Sin mayores explicaciones, esa decisión fue dejada sin efecto por la gestión de Guillermo Dietrich, que le cambió el nombre a la empresa por el actual y la mantuvo operativa a pesar de que había perdido su función principal. Dietrich también frenó la transformación de la ex ARHF en Sociedad del Estado –actualmente es una SAPEM, una Sociedad Anónima de control estatal–, paso necesario para su fusión con la SOFSE.
La actual gestión, por su parte, le imprimió a la DECAHF un perfil más orientado al mantenimiento del patrimonio ferroviario y la gestión de los archivos y del Museo Nacional Ferroviario, amén de la gestión del CENACAF.
Hasta el momento, en el directorio de Ferrocarriles Argentinos estaban representados los presidentes de la SOFSE (pasajeros), BCyL (cargas) y la ADIF (infraestructura). Con esta medida, las autoridades de Transporte resolvieron integrar a la estructura de conducción del grupo a la DECAHF.
Las reformas adoptadas en la reunión de directorio no marcan hasta el momento un rumbo claro sobre el futuro de Ferrocarriles Argentinos, que a un año del recambio de gobierno continúa con la existencia fantasmal que le imprimió la gestión Dietrich. La empresa coordinadora sigue sin tener actividad real, limitada a una existencia formal.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario