Sanciones contra Rusia complican agenda ferroviaria de Argentina
ARGENTINA 9 Mar (BNamericas).- Las sanciones para castigar a Rusia por la invasión de Ucrania amenazan su papel en los planes argentinos de inversión ferroviaria.
La situación podría ser especialmente problemática, ya que hasta ahora las inversiones ferroviarias en el país han mostrado resultados mixtos.
A principios de enero, el Ministerio de Transporte adjudicó a la empresa rusa TMH International una licitación de US$864 millones que contempla la provisión de 70 nuevos trenes para el servicio ferroviario San Martín en Buenos Aires.
Sin embargo, el proceso está en duda debido a las sanciones contra el banco de desarrollo ruso Vnesheconombank, cuya unidad de exportación e importación debía financiar el proyecto y ahora fue desconectada del sistema de pagos SWIFT.
“Si las potencias occidentales le cortan la conexión financiera, todos los proyectos en Argentina que tienen que ver con Rusia se van a demorar enormemente”, declaró Juan Pablo Martínez, director del área ferroviaria de la consultora AC&C y exjefe de planificación de la estatal Ferrocarriles Argentinos (hoy Trenes Argentinos), dijo a BNamericas.
Martínez señaló que originalmente se esperaba que el BID colaborará con el financiamiento del material rodante para San Martín, pero se opuso a que TMH se adjudicara el contrato.
Fuentes de gobierno señalaron recientemente al diario La Nación que el Ministerio de Transporte aún no decide si anulará el resultado del proceso.
INICIATIVAS DESIGUALES
Incluso sin considerar los problemas asociados a Rusia, Martínez se muestra pesimista.
Las líneas de transporte de carga fueron renacionalizadas a partir de 2012 y, si bien las últimas tres administraciones invirtieron fuertemente en la rehabilitación de las ferrovías que unen los principales puertos, la línea principal que conduce al puerto de Rosario no ha sido modernizada. Martínez aseguró que esta deficiencia pone trabas a la mayor parte de los beneficios que se esperaba generar con estas inversiones en carga movilizada.
“Hubo un resultado positivo en el corto plazo, aunque hay dudas sobre si esto se va a mantener en el largo plazo”, señaló, para luego agregar que las concesionarias aún concentran el 60% del tonelaje de carga movilizada por kilómetro.
Martínez advirtió además que el discurso público en torno al transporte de pasajeros se enfoca demasiado en una red nacional de larga distancia, pero sería demasiado costosa.
“La inversión que requeriríamos para tener un servicio de pasajeros de larga distancia competitivo sería enorme y no existe demanda que la justifique”, puntualizó. Sería mejor concentrarse en el desarrollo de la red de carga y el sistema de pasajeros metropolitano de Buenos Aires.
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