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El Estado sigue invirtiendo en el tren fantasma K

CAPITAL FEDERAL 2Oct(Perfil).-Aunque los pasajeros brillan por su ausencia, Perfil.com constató cómo una nueva formación llegó a Puerto Madero y se sumó a los dos coches que funcionan desde julio de 2007, cuando Néstor Kirchner cortó la cinta.Hoy a las 8.30 de la mañana desembarcó en Puerto Madero un flamante tren de la compañía francesa Alstom. De esta manera, se suma un coche a las dos formaciones de la misma empresa que funcionan desde julio de 2007, cuando el entonces presidente Néstor Kirchner cortó la cinta de inauguración. Como consignó Perfil.com hace 15 días, las obras para poner en marcha el “Tranvía del Este” significaron una inversión del Estado de 47 millones de pesos y un gasto anual de 350.000 euros por los 2 trenes modelo Citadis 302 (hoy uno está en reparaciones) que el Gobierno le alquiló a la empresa francesa Alstom, cuestionada en estos días por pagar sobornos millonarios para conseguir contratos en distintos países, incluyendo la Argentina y su tren bala. Además, la Ciudad habría aportado 1.500.000 pesos para financiar la iluminación y los cruces de semáforos.Pese a que los pasajeros se resisten a tomar el tranvía del Este (no llegan a mil por día), hoy un nuevo convoy azul y rojo brillante desembarcó en Puerto Madero. Y ocho hombres con mamelucos azules y barretas de hierro trabajaron orquestados durante más de dos horas para bajarlo de un camión y depositarlo en las vías de la estación Independencia, donde funciona el centro de operaciones del Tranvía.Perfil.com estuvo en el lugar y en el momento exacto en el que el coche era encastrado en los carriles correspondientes. El acontecimiento causó revuelo, no sólo entre los automovilistas que pasaban por el lugar, sino también entre los empleados del Tranvía. Conductores, operadores y gerentes, se asomaban desde las casillas de trabajo para ver descender al nuevo convoy. Le sacaban fotos y festejaban las maniobras exactas de los encargados del traspaso.Uno de los operarios que estuvo en el lugar le dijo a Perfil.com que el flamante coche había llegado en barco desde Madrid. Por ese motivo, dos conductores del tranvía viajaron a la capital española para realizar un curso intensivo para conocer los secretos de manejo de la nueva máquina. Luego de insistentes llamados y reiteradas consultas, la única respuesta de parte de la Secretaría de Ricardo Jaime fue el silencio. La empresa Ferrometro (Ferrovías - Metrovías), que se encarga de la operación del servicio, directamente dijo desconocer la llegada de la nueva formación.¿Por qué nadie quiere hablar? ¿Cuál es el negocio de un tren en el que no viaja nadie? ¿Por qué Alstom “prestaría” formaciones al Estado argentino? ¿Por qué el Gobierno sigue invirtiendo en este emprendimiento ferroviario que no llega a transportar mil pasajeros en un día?

Esperando el regreso del tren Por Andrés A. Andreis (*)

SANTA FE 2Oct(ElLitoral).-BLos signos que aún perduran significan un pasado de esplendor de los ferrocarriles: la ciudad se hizo prácticamente por el ferrocarril. La primera industria que tuvo una dimensión importante fue la industria ferroviaria, a través de los talleres del ex Ferrocarril Santa Fe: cuya imagen aún perdura en los galpones del Predio Ferial.Tomando cualquier línea que se bifurque hacia cualquier parte de la ciudad vemos sus vestigios: pasos a nivel, playas de maniobras... Ahí tenemos el Parque Federal, que era la estación Santa Fe Cambios: se ven las vías. A lo lejos se ve la Redonda como algo fantasmal...Es una historia viva, todavía hay protagonistas que pueden contarla. Santa Fe fue tan importante en materia ferroviaria que, siendo una ciudad capital no muy grande, tenía tres estaciones ferroviarias: la del Ferrocarril Santa Fe, la del Central Norte (la tristemente degradada estación del Belgrano) y la que todavía subsiste del Mitre. Esto daba la imagen palmaria de lo fue el quehacer ferroviario dentro de la ciudad y la zona.Ahí están los puentes del Mitre como testigos de una época de esplendor: el que está sobre Suipacha, el otro en Barranquitas, el famoso "Puente Negro" de Aristóbulo del Valle, que era un espectáculo: yendo en colectivo (o más atrás, en tranvía) el paso de un tren, y debajo (sobre las vías que van a Gobernador Vera) las maniobras que se hacían.Santa Fe Cambios era todo un sitio industrial de primer nivel para el Ferrocarril Santa Fe, porque ahí estaban: el depósito de locomotoras, la usina, el vivero, los talleres de vía y obras, donde ahora están el Camco, la sede de los ex combatientes de Malvinas y el Kennel Club. Ahí se hacían las reparaciones de los vagones de carga.La estación del Santa Fe estaba en Hipólito Yrigoyen y San Luis, lo que era el Francés. Fue un hecho insólito tirar abajo una estación tan hermosa, de un diseño tan espectacular, allá por el año '60. Los talleres que continuaron tuvieron distintas etapas de desarrollo y decadencia hasta que en 1978 cerraron definitivamente.Donde el ciudadano camina o circula en cualquier vehículo, se va a topar con un elemento ferroviario que parece no querer desaparecer, que está degradado, abandonado, pero como diciendo "yo tuve presencia, colaboré para el desarrollo de una ciudad de una región de un país; estoy presente, esperando que esto se revierta, que tengamos trenes de nuevo". Quiere decir que está vivo y que, con otras características, el ferrocarril va a volver. Todos lo estamos esperando.(*) Ex presidente del Museo Ferroviario Regional.

Mudos testigos de una historia aún viva

SANTA FE 2Oct(ElLitoral).-Mudos testigos de una historia aún viva Pasos a nivel, estaciones, cabinas de señales, playas de maniobras y torres son el testimonio que permanece de la gloria del ferrocarril, y se insertan en un debate por demás de actual.En Santa Fe, el ferrocarril (o lo que de él queda) es una presencia constante: uno se lo cruza permanentemente. Está en la traza urbana, aunque no se vea (¿qué decir de esa diagonal que va desde Las Cuatro Vías y sigue por la plazoleta Martín Fierro, el estacionamiento de El Litoral, el lavadero de Bulevar y el shopping Estación Recoleta?). Pero más está en las ciclovías, bajo la forma de vías, postes telegráficos, señales, cabinas y dependencias abandonadas. Ni qué hablar de las estaciones, que han recibido destinos alternativos (como la del Mitre, convertida en sede de El Birri) o que aún esperan por un futuro (como la del Belgrano, con su destino comercial frenado en Buenos Aires).Mientras a lo largo de los años se han seguido robando los rezagos ferroviarios (a veces desde dentro mismo del Estado, a veces por particulares entusiasmados por la falta de penalidades), todavía el paseante puede encontrarse con estos objetos sobrevivientes de los tiempos en que los trenes movilizaban personas, bienes y los sueños de un país que era otro. Estación shopping Pino Solanas, realizador del filme "La éltima Estación", en su visita a la ciudad, con el objeto de presentar el filme en las instalaciones del Cine América, afirmó con su polémico talante: "El único medio del que no se puede prescindir es el ferrocarril. No porque me gusta, ni porque mi papá trabajara en el ferrocarril, ni nada de eso. En todas las naciones del mundo no solamente es el más seguro, sino que además es el único irreemplazable, que en las peores condiciones climáticas puede asegurar un servicio regular con niebla, con fogata, con nieve durante tres o cuatro meses en Europa, con tormentas de lluvia. Entra y sale, entra y sale el ferrocarril: no lo puede hacer el automotor ni el avión. Por eso, ninguna nación se dedicó a suprimir su ferrocarril sino todo lo contrario, a perfeccionarlo". En la ocasión, afirmó que su película "comienza siendo un homenaje a la epopeya que fue la construcción de los ferrocarriles en la Argentina, uno de los grandes hechos de la historia nacional; y a los pueblos y trabajadores ferroviarios está dedicada. Esos anónimos trabajadores e ingenieros de todas las categorías que trabajaron en la construcción del ferrocarril". Y tampoco se privó de opinar sobre las iniciativas de reciclado de las instalaciones ferroviarias santafesinas: "Es una infamia inconcebible que ese orgullo arquitectónico nacional que es la estación Belgrano de Santa Fe en octubre pasado el gobierno nacional lo haya concesionado por 30 años para un shopping. Bajo el punto de vista cultural esto es inconcebible: un poquito más y hacen otro casino. Pero lo más grave es que al concesionar por 30 años están diciendo: "Ustedes santafesinos, no van a volver a tener el ferrocarril: por eso vendemos las estaciones' ". Pasado y presente Inevitablemente, la fuerza de recientes acontecimientos ha actualizado una discusión de años sobre la importancia de este medio de transporte. Desde la gloria de tiempos idos, los rezagos ferroviarios son silentes recordatorios de la importancia que tuvo. Para muchos, simbolizan aquello que se perdió y se debe recuperar, aunque de una manera renovada. Mientras sigue el debate, ellos, silenciosos, aguardan.

Buscan reactivar los Ferrocarriles Argentinos

SAN JUAN 30Sept(diariodeCuyo).- Llegaron a la provincia miembros de la Sociedad Operadora Ferroviaria para promover el taller denominado “La Región del Norte Grande y el Ferrocarril Belgrano Cargas. Competitividad e Integración”. El acto fue realizado en la sala de situación Ricardo Colombo de la Casa de Gobierno y presidido por el vicegobernador a cargo del Poder Ejecutivo, Rubén Uñac. Integran la Sociedad su presidente, Marcelo López Arias; la vicepresidenta, Alba Thomas Hatti; Carmelo Nocera, Alfredo Cargniello y Víctor Saller, todos representando a la Secretaría de Transporte de la Nación, quienes abordaron la temática de los “Tráficos potenciales para el comercio exterior e interior. Opciones estratégicas e inversiones". Por San Juan participaron también el secretario de Servicios Públicos, Daniel Campos; el subsecretario de Ciencia y Técnica, Daniel Coll; la directora de Comercio Exterior, Elida Hidalgo; el director y subdirector de Tránsito y Transporte, Francisco Jesús Alenda y José Luis Gambina, respectivamente; cámaras empresariales, personal del Ministerio de Infraestructura y Tecnología. Marcelo López Arias, presidente de la Sociedad Operadora, quien mencionó que las dos sociedades creadas buscan lograr la recuperación del sistema ferroviario, para que vuelva a ocupar el papel que históricamente tuvo. El funcionario señaló que respetarán las concesiones actualmente vigentes, pero se irán tomando las que se terminan. Existen cuatro sistemas que se iniciarán en los próximos meses, entre ellos el Ferrocarril Belgrano que funcionará en San Juan y el resto de Cuyo y Norte argentino. López Arias presentó al ingeniero Cargniello, el responsable de operaciones del sistema; Nocera y Saller están a cargo del sistema de planificación y control de esta sociedad.La idea es efectuar intercambio de trabajo, recoger información y sea el inicio para concretar y acompañar el desarrollo de San Juan y la región. Para Uñac, este seminario taller sobre competitividad e integración permitirá discutir y dialogar y cambiar opiniones sobre la posibilidad de recuperar los ferrocarriles.