Tren Universitario se sigue apostando

El Tren Universitario es barato, pero anda casi vacío por la Ciudad

LA PLATA 3 Agos (El Dia).-Las autoridades de la UNLP siguen apostando a un servicio de transporte que los usuarios no eligen, a pesar de la crisis

Con la mirada puesta en la movilidad y el desarrollo, las autoridades de la Universidad Nacional de La Plata se embarcaron hace más de una década en la creación y luego extensión del denominado Tren Universitario, un proyecto ambicioso que parece todavía en estado de arranque a juzgar por las medidas de prevención de accidentes a través de banderilleros y la convocatoria a los usuarios, aún muy lejos de colmar la capacidad de la breve formación.

Se siguen sumando servicios, cuando, pese al bajo costo del boleto, los usuarios no lo contemplan como una opción para movilizarse, incluso tras el golpe al bolsillo por el “tarifazo” que sufrió el servicio de micros. Esto se observa en distintos momentos del día, y da cuenta de ello un video que puede verse en eldia.com.

Tras el receso invernal, no pasa inadvertida la casi nula cantidad de pasajeros que utilizan el servicio ferroviario universitario. Luego de la última obra de ampliación -finalizada en septiembre del año pasado- inicia su recorrido en la Estación de Trenes de 1 y 44 y llega hasta el Hospital San Juan de Dios, en 25 y 72, con 9 paradas intermedias en las facultades situadas en la zona del Bosque.

Al anunciar con bombos y platillos la importancia de la iniciativa para la Región, se explicó que el proyecto se llevó adelante con el objeto de reactivar el servicio ferroviario con menores costos de traslado y tiempo de viaje, circunstancias que estudiantes, docentes, no docentes y los vecinos, en general, parecen no considerar.

Frente a este panorama desolador, las autoridades de la Universidad siguen apostando a un proyecto ambicioso, dando impulso a la gestión en la esfera nacional para seguir sumando paradas.

Tal como fue puntualizado en EL DIA en repetidas ocasiones, escasean las precisiones cuando se trata de saber con exactitud los ingresos que tiene la UNLP a partir de muchos de los servicios que presta. Lo mismo pasa con el destino: tampoco se sabe con claridad adónde van.