Dos hermanos argentinos crearon una fábrica de durmientes ferroviarios de plástico
Desde la creación del ferrocarril, las vías de todo el mundo fueron trazadas sobre gruesas tablas de madera que, en la mayoría de los casos, eran de quebracho. Y, aunque su reemplazo ya inició hace muchos años, dos hermanos argentinos se unieron para fabricar, por primera vez, durmientes ferroviarios de plástico.
El dúo materializó la idea luego de diseñar las primeras unidades y proyectan crear una empresa para abastecer, en un futuro, a todas las vías de Argentina que aún se sostienen sobre las antiguas maderas.
Y, a pesar de que todavía tienen mucho trabajo por delante, la buena noticia es que ya confirmaron la fabricación de 100.000 unidades, que fueron aprobadas por el Instituto Nacional de Tecnología Industrial (INTI).
¿Cómo lograron los hermanos iniciar la fabricación de durmientes ferroviarios de plástico?
Giuliano y Franco Frola son hermanos que comparten la misma pasión por avanzar y triunfar con su proyecto de fabricar durmientes ferroviarios de plástico.
Bajo el objetivo de evitar el daño al medio ambiente, el dúo se enfocó en diseñar estos artefactos y, finalmente, terminar la primera unidad. Acto seguido, montaron una pequeña planta en Monte Cristo, en las afueras de la Ciudad de Córdoba, para aumentar su producción e intentar captar atención.
Finalmente, gracias a su esfuerzo, su invento fue tenido en cuenta por especialistas de todo el país y, tras la aprobación del Instituto Nacional de Tecnología Industrial (INTI), los hermanos Frola recibieron el visto nuevo para construir las primeras 100.000 unidades.
Los hermanos que se reunieron para construir los primeros durmientes ferroviarios de plástico.
¿Qué durmientes serán reemplazados por las nuevas unidades?
Durante casi dos siglos, los trenes circularon sobre vías montadas en durmientes gruesos, de madera dura, que era obtenida del quebracho.
Pero, debido a que esta especie demora 80 años en regenerarse, los cortes fueron reemplazados por otros tipos de madera. Sin embargo, como la problemática de la tala de árboles se mantuvo, el siguiente paso fue instalar durmientes de hormigón.
Entonces, un dato muy importante es que los nuevos durmientes ferroviarios de plástico no llegan para sustituir a los de hormigón. Sino que serán el reemplazo de las antiguas tablas de madera.
Por último, ante la cifra de unidades encargadas para su debut en el mercado, los hermanos de Córdoba anunciaron que utilizarán cerca de 12 millones de kilos de plástico reciclado, obtenidos de residuos domiciliarios y/o empresariales.
Recolección para construir los primeros durmientes ferroviarios de plástico.
¿Cuáles son los beneficios de los durmientes ferroviarios de plástico?
Está claro que los principales beneficios de los nuevos durmientes ferroviarios de plástico es que no perjudican al medio ambiente y, al mismo tiempo, disminuyen la tala de árboles y evitan que los desechos plásticos contaminen al ser arrojados en el mar o en cualquier otros sitio.
Tienen una gran resistencia y pueden soportar el peso de un tren sin inconvenientes.
Pueden durar hasta 50 años instalados en el mismo lugar y, luego, se los puede reutilizar.
Su instalación es mucho más sencilla y rápida, en comparación a los antiguos durmientes de madera.
Solo se necesita un molde para volcar el plástico derretido y esperar a que se endurezca.
Su fabricación requiere una inversión menor que la realizada para diseñar durmientes de hormigón.
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