viernes, 25 de noviembre de 2022

Memorias de Santa Fe

Nostalgia ferroviaria: los secretos de una chimenea con más de 100 años en el corazón de la ciudad

SANTA FE 25 Nov (El Litoral).-Es un símbolo de un tiempo de auge, de desarrollo y progreso. Está ubicada en lo que hoy es la ciclovía de Pedro Víttori a la altura de calle Iturraspe. En la primera parte del siglo XX funcionó allí la usina del FF.CC. Hoy está detenida en el tiempo.

La vieja chimenea de la usina del Ferrocarril Santa Fe, firme en un paisaje que dista mucho de que fue originalmente.

Gonzalo Zentner

Desde fines del Siglo XIX y hasta mediados del XX, el ferrocarril fue sinónimo de progreso y formó parte de cientos de miles de familias a lo largo y ancho de la República Argentina. Santa Fe no fue la excepción.

En la capital de la provincia, el tren a Las Colonias (luego Francés) dio el puntapié inicial y marcó a fuego la relación de la ciudad con las vías. La infraestructura destinada a tal fin “copó”, en el buen sentido de la expresión, los distintos puntos de una urbe en pleno crecimiento.

Con el correr de los años, la caída y desmantelamiento del sistema ferroviario, sobre todo de la rama de pasajeros, dejó dispersos en la capital santafesina varios de sus elementos más importantes. Desde estaciones, (la Belgrano y Mitre hoy reutilizadas como espacios de convenciones y eventos), pasando por talleres, reconvertidos en oficinas públicas o espacios culturales (Predio Ferial y la Redonda) hasta cabines o viejas estructuras que formaban parte de la infraestructura.

También quedó en pie parte de lo que una vez fue la usina del ferrocarril Santa Fe (luego francés tras la venta a capitales “galos”). Ubicada sobre la calle Iturraspe, entre Pedro Víttori y República de Siria, en la actualidad se puede ver la chimenea cuya inscripción refiere al año de inauguración de la planta: 1918.

Vieja chimenea usina ff.cc

Predio abandonado. Así lucía el lugar antes de la recuperación.

Expansión

Según explicó Andrés Andreis, ex trabajador y por muchos años presidente del Museo Ferroviario, en artículos publicados en El Litoral y en su libro “El ferrocarril. Lo que el tiempo no borró” (2003 Ediciones UNL), la usina surgió ante la necesidad de contar con energía propia a un pujante sistema ferroviario del citado ramal.

“La Compañía Francesa del Ferrocarril Santa Fe había crecido de tal forma hacia mediados de la primera década del siglo XX, que se fue extendiendo a su ámbito industrial, especialmente sus talleres, depósitos y playas de maniobras”, detalló el conocedor de las vías.

Vieja chimenea usina ff.cc

La chimenea en plena construcción. La fotografía está sacada de norte a sur. Crédito: Santa Fe Antiguo

En ese sentido, según el repaso histórico que hizo Andreis,”en poco menos de dos años, fue montada y equipada su propia usina, que en la parte superior de su chimenea lleva inscripto el año de su construcción (1918)”.

Tal y como describe “Santa Fe Antiguo”, que gentilmente compartió la foto con El Litoral, “en primerísimo plano, con una especie de alero, además de la casilla hecha de chapas, el sector de Vía y Obras del Santa Fe: allí se guardaban las zorras, autovías e implementos para que las cuadrillas trabajen en la vía, pero ya no queda nada de esto. Le sigue el sector de telecomunicaciones, que es lo que sobrevive. Allí se reparaban telégrafos, relojes y demás implementos de trabajo. Más lejos, el tanque de agua y, tras él, la usina en construcción”.

Vieja chimenea usina ff.cc

Casi oculta entre árboles, la chimenea permanece sin utilidad alguna; como vívido recuerdo de un tiempo que ya no es.

En la actualidad al recorrer la zona se puede apreciar la chimenea detenida en el tiempo y testigo diario del paso del tren de cargas que varias veces al día pasa por el lugar. Un tótem gigante que quedó emplazado en un lugar que alguna vez fue signo de progreso y que ahora está librado a su suerte.

En lo más alto de la construcción, está la inscripción FCSF 1918.

En línea recta hasta la Redonda

A pocos metros de la usina, la compañía del FF.CC contaba con galpones donde se alojaba todo lo relacionado al material rodante, de allí el orígen del nombre de este sector. “Unidos a ellos, sobre el frente que da a Pedro Víttori, se encontraba un extenso galpón de chapa donde se colocaban los vagones a reparar, especialmente sus bogies, bastidores y ejes”, describió en el citado artículo Andreis. En la actualidad, allí se ubican distintas organizaciones, como el Centro de Ex Combatientes de Malvinas, el Kennel Club y otras.

Unos 600 metros hacia el norte, en lo que hoy es el Parque Federal, se ubicaba la Estación Santa Fe Cambios, destruida a mediados de la década de 1990. Otros 600 metros, se encontraba el taller depósito de locomotoras, transformada 100 años después en La Redonda, un espacio para actividades culturales y sociales (durante la pandemia de coronavirus fue utilizada como gran vacunatorio).

En la primera década del siglo pasado, se levantaron los pilares de la estación que funcionaba como centro operacional de playa de maniobras. “Estaba edificada en madera de pinotea francesa machimbrada. Detrás de su frente se encontraba la vía balanza que conducía a los vehículos a la báscula pesadora de vagones. En este amplio perímetro de vías que sumaban 51-según último registro-, se armaban y desarmaban trenes para distintos destinos”, precisó Andreis.

La vida “útil” de este predio tuvo un cambio significativo en la década del ‘70, cuando fue elegida como la única playa ferroviaria de maniobras dentro de la ciudad. Dos décadas más tarde, con el gobierno menemista, las instalaciones quedan desafectadas en vías de abandono. Para julio de 1996, apuntó Andreis, se produjo un importante incendio que destruyó la vieja estación, dejando ruinas y un escenario propicio para la ocupación ilegal de tierras.

Las llamas "se comieron" una importante parte del predio.

Resurrección en modo de parque

El primer convenio entre Nación y municipio fue en el '95, mientras que en los años siguientes también se firmaron acuerdos referidos a estos terrenos. Para fines del siglo XX, la desaparecida ONABE (Organismo Nacional de Administración de Bienes del Estado), actualmente llamada “Agencia de Administración de Bienes del Estado”, firmó un acta con el gobierno local y se cedieron a la ciudad gran parte de los terrenos de lo que fue la playa maniobras, donde se encontraba la Estación Santa Fe Cambios y La Redonda. La cesión definitiva fue recién en 2005. Lo que vino después es historia conocida. Los terrenos abandonados de “Cambios” se transformaron en el Parque Federal, uno de los espacios públicos más importantes y concurridos de la capital santafesina. En el extremo norte, lindante con calle Salvador del Carril se recuperó el edificio y “La Redonda” abrió sus puertas para actividades culturales, deportivas y sociales.

No hay comentarios.:

Publicar un comentario